27.11.09

Ayer miré el documental CRUDE:
the Real Price of Oil

una historia pionera en la búsqueda informal, intuitiva, de un contrato natural. La sustenta la fuerza de los hechos de la geografía, de la tierra -el cuerpo sometido a una autopsia tardía que prueba, al hundirse en los trazos y las huellas innegables de la negligencia transnacional y nacional, que la violencia es social y medioambiental, y sus efectos, los de una guerra que nunca fue declarada, ni otorga tregua o armisticio alguno.

La recomiendo:
http://www.crudethemovie.com/
Michel Serres ha sabido poner en palabras lo que yo apenas era capaz de sentir. Lo comparto:

"Ahora bien, si existe un derecho, así pues, una historia, para las guerras subjetivs, no existe ninguno para la violencia objetiva, sin límite ni regla, así pues, sin historia... necesitamos, pues, nuevamente, bajo la amenaza de la muerte colectiva, inventar un derecho para la violencia objetiva".

"Si se pasa de la guerra a las relaciones económicas, nada notable cambia en el razonamiento. Quirino, dios de la producción, o Hermes, que preside los intercambios, pueden contener la violencia más eficazmente a veces que Júpiter o Marte y, para conseguirlo, utilizan los mismos procedimientos que este último. Dios único en varias personas, Marte llama guerra alo que los primeros llaman competencia: continuación de las operaciones militares por otros medios, explotación, mercancías, dinero o información. Todavía más oculto, el verdadero conflicto reaparece. Se repite el mismo esquema: por su fealdad y los residuos que accidentalmente arrojan, las fábricas químicas, los grandes criaderos de animales, las centrales atómicas o los gigantescos petroleros restablecen la violencia objetiva global sin otras armas que la fuerza de su talla, ni otra finalidad que la búsqueda, común y contractual, del dominio sobre los hombres.

Llamamos objeto-mundo a un artefacto en el que al menos una de las dimensiones, tiempo, espacio, velociada, energía... alcanza la escala del globo: entre los que sabemos construir, bomba o satélite, distinguimos los militares de otros puramente económicos o técnicos, AUNQUE PRODUZCAN RESULTADOS SEMEJANTES, EN VICISITUDES NO POR RARAS MENOS FRECUENTES, COMO LAS GUERRAS Y LOS ACCIDENTES.

Aliados de hehco por las mismas razones y contratos que antes, los competidores presionan con todo su peso sobre el mundo".

El Contrato Natural
Michel Serres