29.11.08

-como un eco del pasado emerge mi sangre hasta la superficie de este río recorrido en estelas cuyas volutas se revuelcan hacia fondos lodosos –en silencios seductores de encuentros que no dejan huella pero remueven el curso de los ríos, reconfiguran sus ramajes –árboles líquidos, los dedos del Amazonas, se abren paso sus vertientes entre las vertientes verdes de los árboles ambiciosos que aspiran al cielo: torre de babel con miras a alcanzar la luz, habla lenguas múltiples en su discernir ruidoso de pobladores invisibles, acechantes en su pulular oscuro.