14.2.09

Colmenas de contenedores
El borde del agua que sube y baja y no es marino, no se resbala sobre pieles de anémonas ni acantilados que no sean estas carreteras y paredones construidos sobre tierra que alguna vez fue selva y aquí se olvida. El teatro de la Opera?
Atracamos… en pleno centro. En el corazón del corazón de la selva, el barco una espinilla dislocada y demente que regresa a ubicarse en el esqueleto de un pez. Ejércitos de cargadores con camisetas azules, o conductores, nos reciben. Del otro lado, al fondo, la línea inmutable de la selva, verde oscura, siempre engrosando el horizonte del agua, asfixiada entre dos firmamentos, se sostiene…