20.12.08

Entrevista a médico en el Centro de Salud de Iquitos:
¿Cuáles son las enfermedades más comunes entre la gente que acude al Centro? Las diarreicas, una de cuyas principales causas es la falta de potabilidad del agua. También son comunes las enfermedades respiratorias, causadas por los cambios climáticos y el estiaje. Por último, están siempre presentes enfermedades crónicas como la diabetes, el colesterol elevado y la hipertensión.
¿Cómo funciona la dinámica de aseguramiento en Iquitos?
Nuestros pacientes tienen aseguramiento público. El servicio es gratuito para quienes se ubican en el primero y segundo quintiles de pobreza. También hay un seguro subsidiado y otro que depende del pago de aportaciones.
¿Tienen capacidad suficiente para atender a todos los pacientes que acuden al Centro? A veces el sistema colapsa. La demanda sigue siendo superior a la oferta. Los médicos, este rato, tienen que atender, en promedio, a 25, a veces hasta 30, pacientes. Desde el punto de vista de los equipos, enfrentamos el problema de la obsolencia. Muchas de nuestras máquinas ya no sirven y no nos permiten cumplir a cabalidad con nuestras funciones. Para contrarrestar esta deficiencia estamos colaborando con las agencias de cooperación internacional de Corea y España.
¿Se han llevado a cabo acciones para mejorar la provisión de servicios básicos? El proyecto Agua para Todos construyó 7 pozos de almacenamiento de agua. Es un avance, pero no logra abastecer a toda la población y la calidad del agua todavía necesita mejorar.
¿Dónde podemos encontrar datos estadísticos sobre los índices de enfermedad en Iquitos? En la Dirección de Salud, en la oficina de Servicios de Salud; o en el Hospital Regional, en Epidemiología.
¿Cómo manejan las diferencias entre medicina tradicional y medicina institucional cuando los pacientes solicitan la primera? En las periferias de Iquitos la gente suele acudir primero a la medicina tradicional y luego, cuando no logra los resultados deseados, busca tratamientos convencionales. También son muy populares los "frescos": una serie de extractos que sirven para prevenir o curar varias enfermedades. Son un excelente ejemplo de sincretismo de la medicina tradicional y la occidental.
¿Enfrentan problemas por el relativo aislamiento de la ciudad? Al fin y al cabo, a Iquitos solamente puede accederse por vía aérea o por el río. Necesitamos con urgencia una carretera. La dinámica del río es compleja; es muy inestable e impredecible. Ocurre a menudo que nos vemos obligados a referir a nuestros pacientes a hospitales de mayor nivel en Lima, Arequipa o Trujillo. Trasladarlos es difícil, pero nos vemos obligados a hacerlo, porque no tenemos la capacidad para llevar a cabo operaciones que demandan especialistas. Tenemos un serio déficit de profesionales. Si lo pudiéramos suplir, y mejorar nuestros hospitales, no tendríamos que acudir a otros centros. Por ahora, sin embargo, es inevitable que lo hagamos.
¿Qué servicios médicos ofrece este centro? Nos concentramos en servicios de prevención, obstetricia y promoción (educación). Los hospitales se clasifican por niveles y subniveles. Nosotros pertenecemos a los niveles 1, 2, 3 y 4.
¿Qué criterio rige la clasificación? Entre otras cosas, el número de especialidades y subespecialidades ofrecidas.
¿Tienen ustedes clínicas flotantes? Sí, tenemos dos barcos que sirven a las comunidades más alejadas. Uno de ellos tiene su base en Belén.
¿Cómo están los índices de HIV y SIDA en Loreto? Altos. La industria sexual es prominente a lo largo del río. Eso incrementa la incidencia del SIDA y otras enfermedades de transmisión sexual. Las estadísticas, sin embargo, deben estudiarse tomando en cuenta que ha incrementado también el número de denuncias. Es decir, el hecho de que recabemos más información que antes no necesariamente significa que las enfermedades hayan incrementado en la misma proporción.
¿Se está haciendo algo para contrarrestar la incidencia del SIDA? Sí. Hemos realizado varias campañas de concientización y repartimos condones de manera gratuita.
Hemos notado que la explotación sexual de niños es común en la zona. ¿Qué se está haciendo al respecto? El tema de la explotación sexual de niños es difícil. La idiosincrasia de las culturas locales no ayuda, puesto que entre las comunidades indígenas los matrimonios entre adolescentes son comunes. A niños de 12 años se los considera aptos para reproducirse. La mayoría tienen hijos entre los 14 y 16 años. Es decir, su vida sexual comienza algunos años antes que en otras culturas contemporáneas.